Creemos firmemente en que los seres humanos alcanzan la felicidad, cuando consiguen un estado profundo de conciencia, libre de los juicios sobre sus emociones, sentimientos o pensamientos. Es lo que se denomina Mindfulness.
Lo que provoca la infelicidad en los humanos son los deseos no realizados, el vivir en el pasado y el egoísmo de creer ser mejores que los demás. Eso crea emociones, sentimientos y pensamientos negativos que inundan al ser con un aura perversa llena de animadversión y rencores…
El Brandfulness no es más que aplicar la misma filosofía a la empresa: conseguir que todos los integrantes de la plantilla tengan una conciencia positiva, evitando las emociones, sentimientos y pensamientos negativos.
Si las personas que conforman la empresa no son capaces de emocionarse por su marca, su proyecto, su gente y lo que hacen, estarán cojos.
Si no tienen sentimientos positivos como felicidad, humor, alegría, amor, gratitud y esperanza, estarán cojos. Si no tienen pensamientos acertados, construidos por un proceso racional, de abstracción o de imaginación, estarán cojos.
Si los directivos son capaces de aunar las emociones, sentimientos y pensamientos de su gente, lo habrán conseguido. Si no, nunca llegaran a ser líderes de verdad.